El árbitro que se convirtió horas atrás en el primero en señalar un penalti por vídeo, Viktor Kassai, no habría acertado en su decisión a pesar de contar con todo un equipo especializado detrás. El colegiado, que hace no demasiado pitó al FC Barcelona en un partido de UEFA Champions League 2016-17, señaló un penalti del Atlético Nacional sobre un jugador del Kashima, Nishi.

Pese a que el contacto físico existe y podría valorarse como penalti, la realidad es que las imágenes repetidas demuestran que había un ligero fuera de juego del futbolista atacante antes de ser derribado por el jugador del conjunto colombiano, por lo que supuestamente la pena máxima no debería haberse pitado.

La polémica, además, siguió sobre el terreno de juego y después del encuentro -que acabó con 0-3 a favor del Kashima-, dado que el técnico del Atlético Nacional solicitó que se revisara por vídeo un posible penalti no señalado en la otra área sobre un jugador del equipo colombiano, pero Viktor Kassai no aceptó la petición y dejó pasar esa acción.

Polémica con el uso de la videotecnología

Cabe recordar que este tipo de polémicas arbitrales sólo pueden ser revisadas cuando se dé un gol dudoso por fuera de juego, falta, mano u otras circunstancias del reglamento, como un posible penalti o si se desconociera la identidad de un jugador que ha cometido una falta peligrosa y debería ser sancionado con tarjeta.

En cualquier caso, parece que el uso de la videotecnología tampoco está exenta de controversia. Existen acciones, además, que pese a ser repetidas pueden ser interpretadas de diversas maneras en función del árbitro en cuestión.