Dembélé ridiculiza a quienes decían que no es un hombre gol

Con el paso de los primeros partidos de la temporada 2018-19, Ousmane Dembélé está dejando en evidencia a quienes predicaban que el joven y talentoso jugador francés no es un futbolista a quien se le dé bien marcar goles, o que se prodigue demasiado en sus estadísticas anotadoras.

Pues bien, partiendo de la base de que Dembélé acumula ya nada menos que cinco dianas en los seis primeros partidos de la temporada 2018-19, cabe destacar que algunos de estos tantos han sido importantes y han significado victorias para el equipo, como el de la Supercopa de España ante el Sevilla o la diana anotada en Pucela contra el Valladolid, en LaLiga Santander.

Dembélé es cada vez más decisivo y tiene un mayor peso ofensivo en el FC Barcelona. Las propias estadísticas lo dicen, al tratarse del segundo máximo goleador del equipo hasta el momento, tan sólo superado por Leo Messi, y al disparar el joven futbolista galo mucho más que antaño entre los tres palos: lo hace cada 54,3 minutos como media, frente a los 94,1 de su primer año en el conjunto culé.

Dembélé es otro, y su porcentaje goleador ha pasado de 0,17 goles por partido el curso pasado, a 0,83 tantos por encuentro en la presente temporada, en unos registros que dejan en mal lugar a quienes decían que no es un hombre gol capaz de resolver partidos con su pólvora.

El atacante azulgrana ha mejorado mucho en este aspecto, y no tiene techo. Se prevé que con el paso de los compromisos siga mejorando y afianzándose como una pieza determinante en el frente de ataque del FC Barcelona, tal y como lo está siendo hasta ahora.

Dembélé marca más y asiste menos en el Barça

Llama la atención que, por el momento, el único apartado en el que Dembélé luce peores números que la campaña pasada es el de pases de gol. El curso anterior promediaba un pase de gol cada 141 minutos, mientras que esta temporada todavía no se ha estrenado en este capítulo. Mientras siga marcando goles con fluidez, poco habrá que reprocharle.