El futuro de Toni Kroos en el Real Madrid podría terminar en junio de 2023, cuando expira su actual contrato como jugador merengue. Según informa 'SER Deportivos', el teutón ha rechazado los intentos del club blanco por encarar una extensión del vínculo y prefiere esperar a ver cómo transcurre el año, una decisión que, al parecer, ha sorprendido al Madrid.

El mediocentro, de 32 años, ya avisó en diferentes ocasiones que su posible siguiente renovación dependería de cómo se fuera viendo y de qué podría ofrecer al Madrid. En ese sentido, la información asegura que la idea que le ha transmitido a la entidad es que no quiere ser una carga para la futura planificación deportiva. 

El movimiento podría venir inducido por cómo el equipo blanco ha venido fortaleciendo su centro del campo durante dos veranos consecutivos con dos jóvenes (Camavinga en 2021 y Tchouameni ahora) con mucho fútbol por delante y del nuevo perfil que busca Florentino, más energéticos, móviles y de despliegue físico. También el refuerzo público a Fede Valverde, al que se renovó hasta 2027 aunque su anterior compromiso acababa en 2025.

Ciclo natural

Kroos ha vivido una temporada feliz en cuanto a títulos pero de ciertos altibajos en lo personal. La empezó con un problema en el pubis que le terminó obligando a perderse los primeros ocho partidos del curso y fue perdiendo minutos progresivamente en favor de un centro del campo más rejuvenecido con el uruguayo y el francés. La culminación fue el partido de vuelta contra el Chelsea, en abril, cuando fue sustituido en el 72′ y con 0-2 a favor de los Blues en el marcador. En ese momento, las cámaras captaron al alemán muy enfadado con Carlo Ancelotti por el cambio.

El Madrid, pese a haberse sorprendido por la decisión del alemán, la respeta. La entidad de Chamartín sigue valorando enormemente a un futbolista que ya ha ganado cuatro Champions con la camiseta blanca desde que firmase por el club en 2014, procedente del Bayern y a cambio de solo 25 millones.