Parece que con al llegada de Zinedine Zidane al banquillo del Real Madrid todo eran risas y felicidad hasta que la cruda realidad ha vuelto a golpear al equipo blanco. Esta vez en forma de lesión de dos de sus tres artilleros más importantes. Y es que tanto Gareth Bale como Karim Benzema tuvieron que abandonar el terreno de juego antes de lo previsto en el partido frente al Sporting de Gijón.

Benzema lo hizo tras recibir una patada fortuita de su compañero James Rodríguez en su tobillo derecho. El delantero se dolía y no podía seguir después de que su compañero le golpeara con fuerza en una jugada aislada del encuentro, en el minuto 65 de la segunda parte ante el Sporting. Los blancos ya habían dejado el encuentro sentenciado en la primera mitad con los cinco goles.

Pero antes de la salida de Karim del partido se produjo la de Gareth Bale. El internacional galés se resintió de sus problemas en el sóleo de su pierna derecha y tuvo que volver a dejar a su equipo. La cara del futbolista era todo un poema pues parecía que ya conocía que tipo de infortunio le esperaba, pues es la sexta vez desde que está en el Real Madrid que se lesiona en esa parte de su musculatura. Jesé los sustituyó cuando a penas se llevaba jugado un minuto del segundo tiempo.

Si bien la lesión de Benzema parece haber sido sólo un susto y no tendrá consecuencias, la de Gareth Bale de buen seguro le mantendrá alejado lejos de los terrenos de juego unas cuantas semanas. El problema de Bale y las lesiones musculares sigue muy vivo y deja al equipo mermado, sin un hombre importante que esta temporada 2015-2016 ha actuado con cuentagotas.