Está más claro que el agua. Tras la clasificación del FC Barcelona para la disputa de la final de la Copa del Rey 2016-17, el Real Madrid de Florentino Pérez no accederá a que el último partido del torneo del KO español se dispute en el Santiago Bernabéu.

Sería la mejor opción posible por calidad de las instalaciones del estadio como por aforo -es el segundo más grande de España tras el Camp Nou-, y además iría bien tanto a FC Barcelona y Alavés o Celta al coger a todos los equipos a mitad de camino, plasmando perfectamente lo que significa el hecho de jugar en un campo neutral.

El Real Madrid, siempre en busca de la excusa perfecta

En la final de 2012 el Real Madrid aludió a obras en los lavabos, y en 2015 fue un concierto de Bruce Springsteen. Son sólo dos de los precedentes más próximos que dejan claras las excusas que suele poner el Real Madrid para que el Barça no juegue finales en su estadio.

Hace dos temporadas el partido se jugó finalmente en el Camp Nou, mientras que en los últimos años el FC Barcelona ha jugado cuatro veces las finales de Copa del Rey en Mestalla y una en el Vicente Calderón, campo que precisamente se antoja como probable para la disputa de la final de este año 2017, después de la eliminación del Atlético de Madrid.

Antes de que se decida la sede, en cualquier caso, habrá que esperar a ver cuál es la excusa anual de Florentino Pérez y el Real Madrid para que no se juegue en el santuario merengue. Por otra parte, cada vez se incrementan más los partidarios de que las sedes de las finales de Copa se decidan a principios de temporada, para que luego no hayan polémicas.