El Real Madrid está cerca de cerrar una temporada catastrófica. Ya en verano, con las 'fugas' de Zinedine Zidane y de Cristiano Ronaldo, no pintaba demasiado esperanzadora. Al final, la mala planificación deportiva acabó con las esperanzas del madridismo de sumar algún título, tras varios años de éxitos europeos.

Pero lo que se está viendo en los últimos partidos va más allá de la mala planificación deportiva. De hecho, parece que a algunos jugadores ni siquiera les importa terminar la temporada con dignidad. Con el honor que requiere vestir la camiseta del Real Madrid. Desconexiones permanentes y un juego plano, sin alma, que da a los blancos tropiezo tras tropiezo.

Tras los fracasos de Julen Lopetegui y de Santiago Solari al frente del primer equipo, parecía que la llegada de Zinedine Zidane sería un soplo de aire fresco para el conjunto merengue. Pero ni por esas. Hasta el propio entrenador francés se siente impotente por esa sensación de que sus futbolistas no dan todo lo que tienen para tratar de acabar bien la temporada.

Hay algunos casos en concreto que son completamente desesperantes. Gareth Bale deambula por los campos de primera división sin aportar nada al equipo, Toni Kroos sale al césped a dar un paseo... y en Leganés le tocó el turno al queridísimo Marco Asensio, cuya pasividad en el gol de Jonathan Silva -ni le siguió para defenderle ni intentó taponar su tiro- fue alarmante.

Zidane no está consiguiendo que su equipo se conecte. Es cierto que los blancos no tienen motivaciones en la presente temporada porque, además de haber sido eliminados de la Copa del Rey y de la Champions League, están fuera de la lucha por LaLiga Santander. Pero la afición madridista merece ver que su equipo tiene un mínimo de dignidad.

Zidane toma nota

Zidane ha repetido ante los medios por activa y por pasiva que la plantilla sufrirá muchos cambios en la próxima temporada. Muchos integrantes del equipo puede que se estén jugando el formar parte del nuevo proyecto, pero parece que les da igual. El francés pedirá fichajes y empieza a tomar nota acerca de quiénes no van a contar para su futura plantilla.