Este domingo el Real Madrid perdió el liderato de LaLiga Santander tras empatar ante el Osasuna (1-1). El equipo entrenado por Carlo Ancelott suma 19 puntos, los mismos que el FC Barcelona, pero tiene la diferencia de goles en contra (+18 vs +11). Y es que, a pesar de que los madridistas solo han anotado un gol menos que los culés, ha sido alarmante la cantidad de dianas que han encajado en las primeras siete jornadas del campeonato. 

Hasta la fecha, el Madrid no ha conseguido mantener su portería en cero y ha encajado un gol en todas las jornadas, siendo el último el de Kike García en el 'pinchazo' contra el Osasuna. Fue un gol en el que poco o nada podía hacer Lunin, que reemplazó a un lesionado Thibaut Courtois, pero deja en evidencia que algo está pasando en un conjunto madridista que durante el curso pasado encajó muy pocos goles. 

Es una estadística bastante negativa, sobre todo porque el Madrid no registraba un inicio tan negativo en cuanto a jornadas seguidas encajando desde la temporada 1999-2000, tal y como ha reseñado 'Mister Chip' en Twitter. Los madridistas solo han sido campeones de Liga una vez tras haber recibido gol en los primeros siete partidos, en la 1978-1979 cuando Luis Molowny estaba en el banquillo merengue. 

Asimismo, ya son tres décadas desde la última vez que un equipo consiguió llevarse el título de LaLiga después de haber encajado al menos un gol en las primeras siete jornadas del campeonato doméstico. Fue el Barça en la 1992-1993. Antes lo habían conseguido el Madrid (1978-1979), Atlético de Madrid (1949-1950), Sevilla (1945-1946) y Athletic Club (1929-1930). 

El Madrid, con mucho por mejorar 

Si bien todavía es demasiado pronto para sacar conclusiones con respecto al Real Madrid en este arranque de temporada, lo que sí es cierto es que algo está pasando con la zaga defensiva para que estén encajando tantos goles. Thibaut Courtois ha continuado mostrándose como una pieza fundamental del equipo, pero tampoco puede pararlo todo. Lunin, por otra parte, no estuvo muy exigido contra el Osasuna, pero se mostró seguro intervenciones que tuvo. El gol de Kike García era 'imposible' para el guardameta ucraniano.