Cristiano Ronaldo, Luka Modric y Karim Benzema, entre otros, pudieron ver desde las gradas del Santiago Bernabéu la bochornosa actuación del resto de sus compañeros contra el Deportivo de La Coruña, que se llegó a poner por delante gracias a dos goles de Joselu y estuvo muy cerca de sumar puntos en el estadio merengue, de no haber sido por un nuevo gol de Sergio Ramos en el minuto 90 de partido.

Zinedine Zidane se pensaba que con sus jugadores más "terrenales" tendría más que suficiente para lograr una cómoda victoria contra el Deportivo de La Coruña, pero para nada fue así. Los gallegos pusieron en aprietos desde los primeros minutos la portería del Real Madrid, dominando el juego en distintas fases del partido ante las imprecisiones del centro del campo de plastilina del conjunto madridista.

A los blancos les costó horrores encontrar espacios en la línea de ataque, y cuando consiguieron asediar la portería de Tyton fue porque el Deportivo ya había anotado el segundo gol y se marchó hacia atrás, encerrándose en su propio campo para resistir el asedio hasta el pitido final.

No fue así y Mariano, que entró en la segunda mitad, igualó el marcador a dos a falta de poco menos de diez minutos para el final del partido, después de los goles de Morata para el Real Madrid y de Joselu por partida doble para el bando de Riazor.

Danilo, Isco Alarcón y Marco Asensio, entre otros, jugaron a un nivel muy por debajo de lo esperado y quedó demostrado que, pese a que al Barça se le pueda criticar en ocasiones por falta de calidad en el "fondo de armario", el Real Madrid tiene problemas incluso peores con su banquillo. Al final todo acabó como podía preverse: con un nuevo gol de Sergio Ramos en el tiempo de descuento.

El central andaluz impidió, de esta manera, que el FC Barcelona pudiera acercarse en la tabla de clasificación de Liga Santander 2016-17 al Real Madrid, que sigue líder seis puntos por delante de los culés, al menos una jornada más. Queda mucha Liga, y ya habrán más oportunidades.