De nuevo otra vez Cristiano Ronaldo acudió para sacarle las castañas del fuego al Real Madrid en la UEFA Champions League en forma de falta directa, y otra vez el luso lo hizo tras una falta inexistente. El Madrid volvió a beneficiarse de otro regalo arbitral, esta vez en su estreno en la máxima competición continental en esta 2016-2017.

Fue en el minuto 87 cuando una supuesta falta al borde del área fue señalada por el italiano Paolo Tagliavento. El colegiado señaló la infracción que no fue ya que el mismo atacante de Madeira volvió a tirarse descaradamente sin ningún contacto de su defensor. 

Lo que no perdonó el atacante fue el gol, ejecutando a balón parado a su ex equipo. El luso colocó el esférico y armó su pierna para sacarse un globo alto y fuerte que fue bajando hasta tocar en el poste del cancerbero rival acabando por entrar en el fondo de las mallas.

El atacante, eso sí, no celebró el gol del empate dado que guarda un gran cariño a su ex equipo. Un gol que dio posteriormene los tres puntos tras el tanto en el último segundo de Álvaro Morata.