El capitán del Real Madrid, Sergio Ramos, se mostró crítico este pasado martes en la zona mixta del Santiago Bernabéu, justo después de que el conjunto blanco cerrara el pase a los cuartos de final de la UEFA Champions League tras eliminar a la Roma por un global de 4-0 en la eliminatoria, con el ambiente tenso que se vive en las gradas del santuario merengue desde hace unas semanas, con un importante sector del público silbando a los jugadores cada vez que se produce algún error destacado o el partido no marcha según los intereses madridistas.

En esta coyuntura, Sergio Ramos pidió tras el triunfo en Champions League contra la Roma que la afición decida animar más en vez de silbar, dado que el equipo necesita el máximo apoyo posible para encadenar varios partidos con buenos resultados y ahogar sus penas en los cuartos de Champions y los siguientes partidos de Liga BBVA 2015-16, donde ya casi no tienen posibilidades de alzar el título.

"Les pediría que se piensen un poco a la hora de pitar. Yo lo respeto, cuando todo va bien es importante sentir el apoyo de la gente, pero cuando va no tan bien, la gente debería apoyar a los jugadores", comentó el central andaluz del Real Madrid, crítico con los silbidos que se escucharon hacia la figura de James Rodríguez este martes. En este sentido, dejó claro que el apoyo del público es "fundamental el apoyo de la grada".

"Cuando el marcador está a favor, la gente se siente a gusto, olvida los problemas que tiene en casa y suelta la euforia y eso nos sastisface. Cuando animan al equipo, ese cariño nos sirve de mucho". En el Real Madrid tienen claro que la Champions es la "última bala" que les queda para no irse de vacío esta temporada, al igual que la pasada. "La Champions es nuestra última bala, sabemos que se acercan los momentos importantes".

Y, por último, Ramos negó que el Real Madrid desee evitar en cuartos de final a grandes equipos como el FC Barcelona, que se encuentra en un momento de forma espectacular. "Siempre he dicho que para ganar la Champions hay que ganar a los mejores: que sea lo que Dios quiera".