Después de que sonara la flauta con el penalti invisible que le pitaron a Casemiro contra el Levante, en el Real Madrid parecen dispuestos a forzar todavía más la máquina en busca de penas máximas injustas que puedan beneficiarles. Este sábado, en la segunda mitad del Clásico entre Real Madrid y FC Barcelona, en el Santiago Bernabéu, Marco Asensio pareció recibir el disparo de un franco-tirador.

El atacante merengue se dejó caer de repente en el interior del área, justo después de que Gerard Piqué despejase un balón justo a su lado y le rozara ligeramente con la bota. El jugador balear del Real Madrid se tiró al piso y soltó un grito, buscando una complicidad arbitral que no llegó. Undiano Mallenco no picó y le instó a que se levantara, aunque tampoco le amonestó por intentar engañarle.

Gerard Piqué también pidió a Asensio que se levantara y dejara de hacer el ridículo. El Real Madrid intentó sacar petróleo de cualquier jugada o lance del juego que le permitiera sumar un gol, teniendo en cuenta que no ha sido capaz de ver portería en ninguno de los dos Clásicos de esta semana contra el FC Barcelona, cosa que ha pagado con una eliminación en Copa del Rey y el adiós al título de Liga Santander.

Si caídas tan sospechosas como la de Marco Asensio son el argumento principal para intentar conseguir goles... El Real Madrid no anda por buen camino. El 'piscinazo' de Marco Asensio no tardó en viralizarse a través de las redes sociales, con los aficionados pasando vergüenza ajena con la ocurrencia del futbolista merengue, que tenía al árbitro justo enfrente cuando decidió tirarse.

Marco Asensio ya no destaca por su fútbol

En resumidas cuentas, parece que a Asensio le pudo la desesperación por intentar hacer algo de provecho por su equipo, teniendo en cuenta que hace tiempo que perdió la titularidad bajo el mando de Solari, y que esta temporada está siendo un auténtico fracaso para él.

Iba a ser el futuro Balón de Oro y el sucesor de Cristiano Ronaldo en el Real Madrid... Y decir que ha decepcionado es quedarse corto. Asensio directamente no está conectado, y así es muy difícil que pueda convertirse a la larga en un gran futbolista. Y que se hable de él por 'piscinazos' como el de este sábado, y no por su fútbol, es una auténtica pena para este deporte.