Una más para la colección. Cristiano Ronaldo volvió a dejar una mala imagen este pasado domingo contra la selección de Hungría, en un partido gris que la selección de Portugal acabó ganando por 0-1. El caso es que lo más destacado del compromiso fue la absurda patada sin balón de Cristiano a Fiola, jugador contrario, después de que éste le diera un leve manotazo.

Cristiano Ronaldo todavía arrastra la sanción de cinco partidos en Liga por su empujón al colegiado De Burgos Bengoetxea en la ida de la Supercopa de España 2017 en el Camp Nou, pero parece que no escarmienta. El jugador portugués volvió a dar rienda suelta a su rabia contenida cuando, después de tirar un caño de bella factura a Fiola, éste cargó levemente sobre él.

En vez de girarse y protestar al colegiado para que fuese él quien impartiera justicia, el luso se tomó la justicia por su mano y no dudó en propinar una dura patada que no fue castigada con cartulina roja, como debería haber sido con el reglamento en la mano.

Cristiano Ronaldo, con la violencia a rastras

Danny Makkelie, el colegiado del partido, acabó amonestando a ambos jugadores por discutir, colocando el mismo castigo a los dos protagonistas de la contienda. En cualquier caso, se trata de un episodio más de violencia que se suma a la larga lista de polémicas que persiguen a Cristiano Ronaldo, un jugador que en LaLiga española ya ha agredido a varios futbolistas contrarios en las últimas temporadas. 

En la pasada campaña 2015-16, sin ir más lejos, protagonizó hasta seis agresiones a jugadores rivales que quedaron impunes: patada sin balón a David Simón (Las Palmas), puñetazo por detrás a Krychowiak (Sevilla), codazo a Dani Alves (FC Barcelona) agresión sobre Nacho Cases (Sporting de Gijón), patadón a Molinero (Real Betis) y golpe en la cabeza a Lucas Orbán (Levante). Y todo eso en una temporada.