Ni disculpa, ni perdón. Nada de eso se ha encontrado Gerard Piqué en la Ciudad Deportiva de Las Rozas en su primer entrenamiento con la selección española. La 'Roja' ha empezado la preparación de cara a las citas contra Albania e Israel con una suave sesión de recuperación, que ha estado marcada por la tensión de la grada con el futbolista del FC Barcelona.

Pancartas, silbidos y gritos han sido la tónica durante los cerca de 30 minutos que han durado los ejercicios. En el césped, normalidad absoluta, mientras jugadores como Isco o Marco Asensio provocaban el efecto contrario al central. Delante de sus propios aficionados, las dos revelaciones del Real Madrid sí han recibido aplausos.

20 minutos después del inicio la mayor parte del grupo se ha retirado al gimnasio, donde ya estaban Aduriz, Reina y Sergio Ramos. Kepa, De Gea, Azpilicueta, Aspas, Thiago y Pedro han alargado poco más y también se han despedido de los seguidores. Este martes habrá una doble sesión de entrenamientos, aunque esta vez a puerta cerrada.

El vestuario, con Piqué

De momento, donde no parece haber dudas es en el propio vestuario de la selección española. Dos de los futbolistas que han hablado a su llegada a la concentración han mostrado su apoyo a Gerard Piqué, del que han defendido que tiene derecho a expresarse libremente. Tanto Pedro Rodríguez como Jonathan Viera han destacado el compromiso del catalán con la 'Roja', limitando sus opinione al plano deportivo.