Neymar es un futbolista que da que hablar allá donde va, y el Mundial de Rusia no ha sido una excepción. En esta ocasión, el debate se centra en si hay una dureza excesiva contra el delantero o es simulación lo que normalmente le acompaña, algo que en el enfrentamiento entre Uruguay y Francia ha acabado afectando a Kylian Mbappé.
Los hombres de Didier Deschamps ganaban por dos goles de ventaja cuando una acción del joven galo ha provocado una discusión, y la revolución sobre el césped ha durado varios minutos antes de que el colegiado pudiera templar los ánimos. Un pase de espuela del de Bondy lo ha interpretado Cristian Rodríguez como una provocación, y al pasar por su lado le ha propinado un leve manotazo que ha acabado con el punta tendido en el suelo.
No ha tardado Diego Godín en ir a buscarle para reprocharle lo que entendía como una simulación, y el jaleo ha ido acumulando jugadores hasta que el árbitro ha logrado poner paz, con una tarjeta amarilla para cada uno y una advertencia de que no toleraría más peleas. Mientras Mbappé se sorprendía por el veredicto, se sucedían los comentarios sobre su comportamiento, y uno de ellos ha sido especialmente crítico.
"¡Vaya! No me puedo imaginar dónde ha aprendido eso Mbappé", ha dejado caer Gary Lineker, haciendo referencia a Neymar sin mencionarle directamente. Lo cierto es que la jugada ha recordado mucho a las que se afean al de Sao Paulo, y que se ha hecho muy amigo del francés desde que ambos comparten vestuario en el PSG.
El teatro de Neymar, protagonista del Mundial
La situación a la que se enfrenta Neymar no es, para nada, nueva, puesto que la fama le ha acompañado a lo largo de su carrera, pero ha tomado especial relevancia en Rusia porque ha sido comentada en varios partidos de la 'seleçao'. Los episodios están dando para mucho, y mientras todos dan su opinión sobre el asunto, Brasil afirma que hay una campaña infundada contra su gran estrella.
De momento, al crack ya le han dedicado numerosos 'memes' y hasta un estudio, que revela que en lo que va de campeonato ya ronda el cuarto de hora tendido sobre el césped. Habrá que ver si el verano depara alguna sorpresa respecto a su futuro, pero en unos meses volverá a enfrentarse a un juicio por su comportamiento, sea donde sea.