El director técnico de la Federación Brasileña de Fútbol, Gilmar Rinaldi, aconsejó a Neymar que no hablar con el árbitro Enrique Osses en el túnel de vestuarios justo después de ser expulsado del encuentro, pero el futbolista no le hizo caso y agravó todavía más su sanción

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En declaraciones concedidas a "L'Équipe", Gilmar Rinaldi ha asegurado que fue imposible calmar a Neymar justo después de que el colegiado del Brasil-Colombia le expulsase al término del segundo partido de la Copa América 2015.

El director técnico de la Federación Brasileña de Fútbol advirtió al capitán de la "canarinha" que no fuera a hablar con el árbitro en el túnel de vestuarios justo después del encuentro, pero Neymar hizo caso omiso de sus consejos y agravó aún más las cosas. Si no hubiera corrido a hablar con él, quizá la sanción no hubiera sido de cuatro partidos sin jugar.

"Le dije (antes de que Neymar hablara con el árbitro), cuidado, porque eres responsable de tus actos", asegura Rinaldi. "Es justo que hable con el árbitro, me dijo Neymar. Y le respondí que no era el momento. Pero todo esto es un aprendizaje. Yo participé en su nominación como capitán y no me arrepiento. Tengo que preparar a un gran capitán. Si todo estuviera ya hecho, sería menos interesante".

Al final, Neymar fue a hablar con el árbitro y todo se agravó, pero nadie duda en Brasil de que Neymar debe ser el capitán de la "canarinha" al igual que Leo Messi lo es de Argentina. "Neymar tiene un liderazgo natural pero debe adaptarse en según que contextos. El grupo recibió bien su nominación".