Pasan los días y el culebrón de la Supercopa de España continúa esperando una solución. La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) intenta mediar entre el FC Barcelona, el Sevilla y LaLiga, pero los compromisos europeos de los andaluces han convertido su programación en una auténtica quimera. Los catalanes, eso sí, no están de acuerdo con algunas de las propuestas que se manejan.

Fue Luis Rubiales, recientemente elegido presidente de la Federación, el que dio una vuelta más en busca de una apuesta por un camino distinto, que tampoco ha convencido a todos: "Hay una tremenda voluntad por parte de la RFEF de llegar a un acuerdo. Nos hemos encontrado con un calendario que era el que era y en la Supercopa hay dos posibilidades, jugar a dos o a un partido, para lo que hay que hablar con la televisión que tiene los derechos, con el Barça, con el Sevilla y con LaLiga. Si todos ceden y se da lo haremos".

La respuesta ha llegado poco después tras la reunión de la Junta Directiva azulgrana, con el portavoz Josep Vives aclarando la postura del club. "Queremos jugar a doble partido porque la competición es así y siempre ha sido así, y porque jugar uno de esos dos partidos en el Camp Nou genera unos recursos muy importantes para el club", ha defendido.

Así pues, si en la Ciudad Condal mantienen esta dirección, tocará aplazar el veredicto hasta dentro de unos días, con una reunión prevista para el próximo lunes 18 de junio en la que se acercarán posturas y podría haber una decisión oficial. El primer título de la próxima temporada está en juego, aunque de momento el acuerdo parece lejano.

La Supercopa necesita acuerdo por un segundo día

El Sevilla estará inmerso durante el mes de agosto en las previas de la UEFA Europa League, programadas para los jueves 26 de julio y 2 de agosto (la primera), 9 y 16 de agosto (la segunda) y 23 y 30 (la tercera), con una Liga que comenzará además el sábado 18 y el domingo 19 de agosto, con jornada por disputar también el 25 y el 26 del mismo mes.

Con el calendario tan apretado, el 12 de agosto se antoja como la única posibilidad factible para jugar la Supercopa de España, pero hace falta encontrar otra fecha para la vuelta. La propuesta de la RFEF es el día 19 de agosto, pero habrá que ver como encaja en los planes de los hispalenses, que definirán también el arranque de curso del Barça.