Las reacciones en el mundo del fútbol, y fuera de él, no se han hecho esperar después del fallo del Tribunal de Justicia de la UE respecto al proyecto de la Superliga. Este jueves el organismo con sede en Luxemburgo hizo saber mediante un comunicado que la UEFA y la FIFA no podrán ir en contra de los clubes que deseen organizar una competición sin su aprobación, algo que ha traído comentarios desde las propias organizaciones.

De hecho, desde Reino Unido ha llegado la postura abierta del propio Gobierno británico, asegurando que presentarán una legislación que pueda ir en contra de la Superliga. "Fue condenado universalmente por los aficionados, los clubes y el Gobierno. Presentaremos la legislación que lo hará realidad e impedirá que los clubes se unan a competiciones similares", fue la decisión del Gobierno, según apuntó el periodista Rob Harris.

En Reino Unido están alejados de cualquier idea de cambio

El rey Carlos III leyó el programa legislativo del Gobierno británico para el próximo año, el último antes de unas elecciones previstas para otoño de 2024. En él, hizo referencia explícita a una nueva ley del fútbol que evitará a los clubes de la Premier League unirse a la competición europea fuera del control de la UEFA.

Esa postura del fútbol británico, destacando por supuesto a la Premier , podría dejar en una situación comprometida a la liga si en algún momento el proyecto estuviese listo para comenzar y los futbolistas decidieran apostar por un cambio de aires ante la decisión inflexible del Gobierno. Sin embargo, no han sido los únicos organismos internacionales y europeos que se han posicionado en contra de la Superliga.

En Italia y Francia también han decidido sumarse al desacuerdo con la Superliga

'Lusport' ha apuntado que el presidente de la Federación Italiana de Fútbol (Figc), Gabriele Gravina, ha dado un ultimátum a todos sus equipos nacionales bajo la premisa de “quien se una a la Superliga, se queda fuera de la Serie A y del resto de competiciones oficiales”, explica la información. En Italia no contemplan como compatible con el resto de las competiciones, ya que Gravina alega que “es indispensable disputar dos o tres campeonatos dentro de una serie de organizaciones diferentes”.

Además, desde Francia el presidente de la Liga de Fútbol Profesional, Vincent Labrune, apuntó que "apoya inequívocamente las competiciones organizadas por la UEFA. Nada puede sustituir la legitimidad, la credibilidad y el prestigio de las competiciones europeas tal como se organizan desde hace más de 60 años. Estamos muy apegados a los principios del mérito deportivo que deben regir la organización de nuestro deporte: ya sea en el contexto de las clasificaciones para las competiciones europeas, pero también, de manera más general, a los principios de ascensos/descensos", reza el comunicado oficial.