El Fútbol Club Barcelona afronta con gran expectación la gala del Balón de Oro de este lunes en el Théâtre du Châtelet de París. Una delegación encabezada por Joan Laporta y acompañada por Lamine Yamal, Raphinha y Pau Cubarsí acudirá a la capital francesa en una cita que mantiene en vilo al barcelonismo.
La noticia filtrada de que Ronaldinho será el encargado de entregar el galardón más prestigioso del fútbol ha disparado el optimismo en Can Barça. Muchos aficionados lo interpretan como un guiño.
El club viaja además bajo la mirada atenta de Hansi Flick, que también está nominado al Trofeo Johan Cruyff como mejor entrenador del año. La expedición azulgrana llega con la ilusión de revivir un momento histórico seis años después de que Leo Messi conquistara su último Balón de Oro.
Ousmane Dembélé ¿El gran favorito?
Aunque en Barcelona reina la ilusión, en Francia los focos se dirigen hacia un viejo conocido: Ousmane Dembélé. El delantero de Vernon explotó la pasada temporada bajo la dirección de Luis Enrique, alcanzando cifras espectaculares con 35 goles y 16 asistencias.
El París Saint-Germain conquistó su primera Champions League con el francés como líder ofensivo del equipo. Para la prensa gala, eso lo coloca como favorito indiscutible para llevarse el galardón.
La posibilidad de que un exjugador culé se lleve el premio genera sentimientos encontrados en la afición barcelonista. No obstante, la esperanza de un desenlace inesperado, como ya ocurrió en la pasada edición, mantiene viva la ilusión en el entorno azulgrana.
Ronaldinho ilusiona al barcelonismo
El nombre de Ronaldinho como encargado de entregar el premio ha sido interpretado en Barcelona como un guiño al pasado y una posible señal a favor de un futbolista culé. El brasileño, que conquistó el Balón de Oro en 2005 vistiendo de azulgrana, es un mito eterno para el club y su presencia en el escenario parisino podría convertirse en un impulso emocional para la delegación culé.
Las comparaciones se disparan: Raphinha, pichichi de la Champions 24/25 con 13 goles, comparte raíces brasileñas y ciudad de origen (Porto Alegre) con Ronaldinho. Por otro lado, la Laminemania mantiene vivas las ilusiones de quienes sueñan con ver al joven de Rocafonda romper todos los récords y convertirse en el ganador más precoz de la historia del galardón.
Y también a los parisinos
En la prensa francesa, sin embargo, el relato es distinto. Allí recuerdan que Ronaldinho aterrizó en Europa precisamente a través del PSG, cuando llegó en 2001 procedente del Gremio. Desde París interpretan la elección del brasileño como una referencia favorable a los intereses del club galo y a la candidatura de Dembélé.
Esta dualidad de lecturas alimenta aún más el interés mediático por un desenlace que se conocerá en la noche del lunes, en una ceremonia que promete emociones fuertes para los aficionados del fútbol en general y para los seguidores azulgranas en particular.
Se cumplen seis años del último Balón de Oro culé
Han pasado seis años desde que Messi levantara el último Balón de Oro del Barça. Ahora, con Raphinha y Lamine Yamal en la terna de candidatos, el club catalán sueña con romper la hegemonía de otros grandes nombres y volver a situar su escudo en lo más alto del fútbol mundial.
La expectación es máxima y el desenlace, incierto. Lo único seguro es que la delegación azulgrana viajará a París con la ilusión intacta y con la convicción de que el fútbol siempre guarda espacio para las sorpresas.