Bernardo Silva completó uno de sus mejores partidos de la temporada el miércoles ante el Real Madrid (4-0). El luso convirtió un doblete en la primera parte que encaminó la goleada de los de Pep Guardiola, sellando el 'baño' del conjunto 'sky blue' a los blancos con dos goles en los que demostró lo que tantas veces ha elogiado el técnico catalán: su inteligencia para superar a los rivales con técnica y buen juego. 

En el minuto 23, cuando el dominio del City ya era abrumador, el de Lisboa aprovechó un pase de Kevin De Bruyne para fusilar a Thibaut Courtois con un remate al primer palo que recordó mucho a la definición de Riyad Mahrez en el 0-1 en Chamartín la temporada pasada. Silva desbordó a placer por izquierda, retratando a Eduardo Camavinga durante los primeros 45 minutos.

Bernardo pudo marcar, incluso, de cabeza

Tanta fue la diferencia entre el luso y el galo que a Carlo Ancelotti no le quedó de otra que ingresar a Antonio Rüdiger en el complemento, moviendo a David Alaba al costado y a Camavinga al centro del campo para cubrir la salida de Luka Modric. Sin embargo, el daño ya estaba hecho para un conjunto 'merengue' desdibujado por el juego de los locales y la falta de ideas de su tridente ofensivo.

Previamente, Bernardo había ampliado la ventaja en el minuto 37, aprovechando un rebote de Courtois tras un remate mano a mano de Gündogan. El balón quedó flotando cerca del punto penalti y el luso, tirando de técnica, cabeceó totalmente solo colocando el balón cerca del palo para evitar la intervención de un Alaba que se había quedado cubriendo el arco ante la salida desesperada del portero belga. El tanto, prácticamente, liquidó el partido, ya que llegó justo cuando los de Ancelotti parecían reaccionar.

El Barça no debe olvidarse de Bernardo Silva

Si bien su precio puede ser prohibitivo (80 millones de euros), el FC Barcelona no debe descartar algún movimiento por el luso en verano. Silva ya manifestó a la directiva 'sky blue' su intención de salir el año pasado y, si consigue ganar la Champions este año, lo más probable es que vuelva a intentar salir en la próxima ventana de pases. A sus 28 años y con dos temporadas restantes de contrato, el Barça intentaría ofertar a la baja, pero difícilmente podría ficharle por menos de 60 'kilos'.