Llegaba con cierto aire de obligación para empezar con buen pie y sin sustos, y aunque hubo que trabajar como siempre, el FC Barcelona no sufrió vértigo y saldó su debut en la Champions con una goleada frente al PSV EindhovenEl camino hacia el título arrancó con la enésima exhibición de Leo Messi, en otra actuación que muchos aficionados no se quisieron perder.

Entre los invitados célebres del conjunto catalán había uno muy especial, y es que, según el diario 'Sport', Claudio Bravo estuvo este martes en el palco del Camp Nou. El chileno asistió a un partido importante para su ex equipo, en el que además pudo ver como su compatriota Arturo Vidal disfrutaba de más minutos con la camiseta azulgrana.

Cabe recordar que el guardameta, hoy en las filas del Manchester City, sufrió una grave lesión en un entrenamiento el pasado mes de agosto. Tras romperse el tendón de Aquiles de su pierna izquierda, tuvo que pasar por el quirófano, y volvió a la Ciudad Condal para ponerse en manos del especialista Ramón Cugat. Además de su intervención en la Clínica Quirón, está aprovechando sus días libres.

En el Etihad Stadium, el de Viluco no ha tenido suerte, porque más allá de sus problemas físicos, ha perdido progresivamente la titularidad. Tras llegar a la Premier League después de una etapa brillante y exitosa en el Barça, se ha visto relegado a un papel secundario, con Ederson Moraes situado hoy día como máxima referencia bajo palos.

El Barça sigue muy concentrado en Champions

Además de hacer sus propios deberes, el Barça prestó especial atención al otro partido del Grupo B, que acabó con remontada in extremis del Inter de Milán ante el Tottenham. Un tanto de Christian Eriksen parecía allanar el camino de los ingleses, pero las dianas de Mauro Icardi y Matías Vecino en los instantes finales voltearon el electrónico.

Esta derrota hará que el enfrentamiento contra los londinenses de la próxima jornada cobre especial importancia, ya que si los catalanes se imponen a los de Mauricio Pochettino el próximo 3 de octubre darán un paso de gigante hacia octavos. Ninguno de los adversarios va a dar facilidades, pero los culés están capacitados para responder a su papel de favoritos.