Pese a golear en el encuentro de ida, se dio el peor escenario posible en el partido de vuelta de los cuartos de final de la Champions League: el Barça jugó su peor partido de la temporada y falló cuando más fácil lo tenía. Los azulgranas salieron desubicados ante una Roma que se creyó desde el primer minuto que la remontada era posible. 

Durante las últimas semanas ya había indicios de que el FC Barcelona no pasaba por su mejor momento. El equipo había mostrado algunos síntomas de debilidad, tanto en Liga como en Champions League. Finalmente, el hecho de coquetear con el fuego europeo terminó quemando a los azulgranas.

Cuatro indicadores de que algo no iba bien en el Barça

Messidependencia

Ante la Roma volvió a quedar demostrado que la inspiración de Leo Messi es el factor diferencial de este FC Barcelona. Si el astro argentino no aparece, los argumentos ofensivos del equipo azulgrana se reducen a un golpe de suerte. No es la primera vez ni será la última que el equipo no carbura si el '10' no tiene el día, quedando demostrado en demasiadas ocasiones en la presente temporada. 

Desgaste de los jugadores

Ernesto Valverde ha cambiado radicalmente la estrategia de Luis Enrique en cuanto al sistema de rotaciones: si con el asturiano eran constantes en casi cada partido, con el extremeño se han reducido sustancialmente. Algo que ha sumado fiabilidad al equipo en los partidos contra rivales asequibles pero que se ha acabado pagando en el partido clave de la temporada. Salta a la vista que al equipo le falta frescura física.

Juego poco fluido

Desde hace varias semanas se ha hecho evidente que el Barça no es un equipo tan fiable como a principio de temporada. Se ha perdido solidez defensiva, algo que era la base de la trayectoria azulgrana en la presente campaña. Por otra parte, el juego ofensivo del equipo también se ha visto resentido, tal vez como consecuencia del mencionado desgaste físico. En la ida se goleó, pero el juego dejó mucho que desear en cuanto a ocasiones de peligro. 

Sin inspiración fuera de casa

La gran asignatura pendiente del FC Barcelona desde hace tiempo es la poca contundencia del equipo lejos del Camp Nou. Pasó la pasada temporada, con goleadas en el campo del PSG (4-0) y de la Juventus (3-0). Con Valverde tampoco ha mejorado la cosa, empatando ante la propia Juventus en liguilla, ante el Chelsea en octavos y, de Roma, mejor ni hablar. El Barça ya no asusta fuera de casa.