De cara al duelo de ida de las semifinales de la Champions League que enfrentaba al FC Barcelona y al Liverpool, ambos equipos presentaron sorpresas en sus alineaciones. Ernesto Valverde dio entrada a jugadores como Arturo Vidal o Philippe Coutinho para adaptar su estilo al del equipo de Jurgen Klopp, pero el técnico alemán también presentó novedades.
Una de ellas fue la suplencia de Roberto Firmino, una de las grandes estrellas del conjunto 'red'. El delantero brasileño sufrió recientemente un desgarro muscular que ya evitó que estuviese en el once de Klopp ante el Huddersfield y que le hacía duda para el Camp Nou. El técnico germano decidió no arriesgar con él y mantenerle en el banquillo.
Hay que recordar que estamos hablando de un jugador básico en el Liverpool, que forma un tridente letal junto a Mohamed Salah y a Sadio Mané. El brasileño mezcla a la perfección con sus dos compañeros y no hay jugador en la plantilla que pueda cumplir con su papel, aunque Klopp ideó otra fórmula para plantarse en territorio culé
En el duelo de Premier League contra el Huddersfield, Daniel Sturridge fue el encargado de sustituir al brasileño, pero el británico no repitió en el once. Klopp apostó por cambiar el sistema de juego y prescindir de un delantero, convirtiendo su ya habitual 4-3-3 en un 4-4-2 con Salah y Mané como únicos futbolistas en punta.
De este modo, el Liverpool saltó al terreno de juego con Alisson; Gómez, Matip, Van Dijk, Robertson; Fabinho, Milner, Wijnaldum, Naby Keita; Sadio Mané y Salah. Klopp resguardó su centro del campo con con cuatro futbolistas con mucho recorrido y despliegue como Fabinho, Milner, Wijnaldum y Naby Keita para tratar de frenar el dominio azulgrana.
Firmino estará en la vuelta
El Camp Nou es un estadio amplio y largo, con muchos metros por defender, por lo que Klopp no arriesgó con el estado físico de Firmino y aprovechó para poblar la medular y dificultar el juego culé. Sin embargo, en Anfield se espera que el técnico germano salga con todas sus armas ofensivas y Firmino, que ya estará al cien por cien, no puede faltar en su arsenal.