Tres años con Laporta: Los mejores y peores momento de 'Jan' en su regreso a la presidencia

Joan Laporta está de aniversario. El 7 de marzo de 2021 el FC Barcelona celebró sus elecciones presidenciales tras la dimisión de Josep María Bartomeu, el 27 de octubre de 2020. El abogado catalán no tuvo 'competencia' y firmó una goleada con el 54,48% de los votos. Ha vivido una montaña rusa, con la sensación de que no ha podido cumplir con todo lo que se imaginaba al momento de su regreso a los despachos azulgrana.

Desde el comienzo ha vivido de 'locura' en locura'. Pasaron diez días antes de que pudiera ser investido como presidente, después de obtener a último momento los avales necesarios. Han sido tres años llenos de altibajos y momentos de incertidumbre... Prevaleciendo el intento de regresar al Barça a lo más alto, aunque resultó ser más complicado de lo que 'Jan' anticipaba en su campaña. Ha experimentado tres años difíciles y, sin duda, no se imaginaba la profundidad de la crisis por la que estaba pasando el Barça.

El 'factor Messi' como condicionante de Laporta

Laporta se encontró con pérdidas millonarias y una situación económica, como mínimo, delicada. El club sigue estando en cuidados intensivos y se han vivido momentos más duros de los que cualquiera se esperaba, protagonizados por la gestión de la salida de Lionel Messi en 2021, meses después de que el máximo mandatario asumiera el cargo. El abogado pasó mucho tiempo generando esperanza sobre la renovación y en innumerables ocasiones insinuó que el acuerdo estaba listo y solo faltaba la firma. Sin embargo, tras las vacaciones de Messi y dos días después de su regreso a Barcelona, le comunicaron que era imposible que continuara en el club debido a que no podían inscribirlo en la Liga por exceder el límite salarial.

La relación quedó muy tocada con el argentino, que se marchó al París Saint Germain por dos temporadas. Al finalizar su contrato, en el verano de 2023, se tanteó la posibilidad de su regreso. Fueron meses en los que se generó la expectativa, pero la realidad chocó de golpe: Dos años después de la salida de 'La Pulga', el club tampoco era capaz de inscribirle en LaLiga y la decepción volvió al barcelonismo. La historia se repetía, una vez más, y Laporta con su junta no ofreció esa solución que tanto se esperaba. 

Fair Play, palancas... Lo que ha marcado al Barça

A lo largo de estos tres años, se ha hablado más del Fair Play financiero, de las 'palancas' económicas o de avales que de cualquier otra cosa. Incluso, en ocasiones, más que de fútbol. Y es que, a pesar de que se han tomado muchas medidas para 'solucionar' la crisis económica (patrocinios, venta de patrimonio, entre otras tantas acciones), en el fondo ha quedado la sensación de que el Barça no ha podido salir definitivamente de cuidados intensivos y que, por ello, le cuesta competir más al máximo nivel. 

En el apartado de los sponsors, se han conseguido alianzas con Spotify (2022) a razón de 67,5 milones de euros anuales por el patrocinio de la camiseta y el 'naming right' del Camp Nou, así como la firma com Ambilight TV por 56 'kilos' hasta 2026, igual que la plataforma de streaming musical. Son los 'negocios' que sostienen a la economía azulgrana tras las 'palancas' económicas de 2022. 

El lío con los fichajes en tres años

Los catalanes han invertido 241 millones en fichajes sin contar variables: Ferran (55+10M€) en el mercado de fichajes invernal de 2022, seguido por los traspasos 'gracias' a la venta del 25% de los derechos de TV de LaLiga por 25 años por (522,5 millones), además del 49% de Barça Vision, aunque es una operación que sigue sin cerrarse casi dos años después. Lo cierto es que de esos montos se tomó dinero para comprar a Raphinha (58+7), Lewandowski (45+5) y Koundé (50+12,5). En el último verano se llegaron acuerdos por Vitor Roque (30+31) y Oriol Romeu por 3,4M€. 

No han sido los únicos jugadores que se han vestido de azulgrana en estos últimos tres años. Y es que la dirección deportiva, primero con Mateu Alemany y Jordi Cruyff, y actualmente con Deco, ha conseguido las incorporaciones gratuitas de Memphis, Eric, Agüero, Alves, Christensen, Kessie, Iñigo, Gündogan, Aubameyang, Bellerín y Marcos Alonso, así como las cesiones de Adama Traoré, Luuk de Jong, Joao Cancelo y Joao Félix. Al equipo no le han faltado refuerzos, pero nunca con la sensación de años anteriores en los que podían competir con clubes como el Real Madrid, París Saint-Germain o Manchester City, los 'ricos' de Europa. 

Esa ha sido la gran y dura realidad del Barça en estos últimos años. Se han quedado un paso por detrás de los 'grandes' -en el aspecto económico- y les ha pasado factura en el apartado deportivo. En el periodo presidencial solo se han celebrado tres títulos: Copa del Rey (2021), Supercopa de España (2022) y una Lia (2022). En el camino, se han quedado dos veces en fase de grupos de Champions League y posteriormente firmaron su 'KO' en Europa en cuartos y dieciseisavos, respectivamente. Este año mantienen la esperanza con los octavos de final de la máxima competición. 

La Masia como máxima luz en el Barça

Como mencionábamos anteriormente, ha reinado la incertidumbre en más de un momento: Con la renovación frustrada de Leo Messi, el despido de Ronald Koeman, la contratación de Xavi Hernández... Cada extensión e inscripción de los contratos de los jugadores un sufrimiento, aunque el club siempre ha encontrado la fórmula, 'in extremis' de solucionar sus problemas. 

Han sido tres años de vivir al límite, pero también han habido momentos de alegría y soluciones por destacar. Joan Laporta ha sido el principal defensor de los jugadores de La Masia. Su sueño es ver un XI lleno de jugadores formados en las categorías inferiores en el nuevo Camp Nou. Los Gavi, Balde, Araújo, Cubarsí o Lamine Yamal han sido impulsores del proyecto. La intención es que se mantenga así porque, salvo Superliga europea, el Barça seguirá varios años viviendo con lo 'mínimo' en el mercado de fichajes.