Una de las grandes características de la sociedad catalana es que nunca se da por vencida a la hora de conseguir sus objetivos. Y si este domingo finalmente no se hubieran podido exhibir banderas esteladas en el Vicente Calderón, la afición del FC Barcelona habría encontrado otra forma de reivindicar sus ideales políticos y culturales si hubiera querido.

De hecho, diversas plataformas catalanas como la Asamblea Nacional Catalana (ANC), Òmnium Cultural, asociación Drets y la Plataforma ProSeleccions Catalanes planeaban repartir un total de 10.000 banderas escocesas entre los aficionados del FC Barcelona este domingo, junto a la "Fan Zone" del Barça y de forma totalmente voluntaria para todos aquellos que quisieran reivindicarse.

La Delegación del Gobierno de Madrid había prohibido exhibir esteladas en la final de Copa del Rey y el hecho de exhibir banderas escocesas se planteaba como una solución mediática y contundente. "Nos podrán prohibir llevar una bandera, pero no nos podrán prohibir jamás la libertad", era el lema de la campaña iniciada por las entidades mencionadas.

Finalmente, el hecho de que el juez Torres Martínez fallara a favor de la libertad de expresión echó hacia atrás la iniciativa, que sin lugar a dudas habría provocado que la final de Copa del Rey entre FC Barcelona y Sevilla diera la vuelta al mundo.

El objetivo era que las banderas escocesas se mostraran durante la previa del partido y en el minuto 17.14, cuando en el Camp Nou se reivindicara la independencia de Catalunya. Al final, por suerte, el sentido común, la lógica y la libertad de expresión se acabaron imponiendo y se permitió la presencia de banderas esteladas en el Vicente Calderón.