Este martes se ha celebrado en la sede de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) el sorteo de los octavos de final de la Copa del Rey. De nuevo, el Real Madrid ha salido beneficiado por su enfrentamiento, que será ante un equipo de Segunda División, el Numancia de Soria. De este modo, el equipo blanco esquiva a los equipos de LaLiga Santander.

Sin embargo, el Real Madrid ya viene de pegarse un susto en su eliminatoria contra el Fuenlabrada, equipo de Segunda División B. El equipo de Zinedine Zidane, en este caso, no se puede permitir el lujo de darle concesiones a un rival muy inferior a los blancos sobre el papel. El Numancia, por su parte, no tiene nada que perder y lo quiere aprovechar.

El partido de ida se disputará la semana del 3 de enero en Los Pajaritos, histórico estadio del club numantino. Algo que puede ser un hándicap para el Real Madrid, que se verá expuesto en pleno invierno a jugar en una de las ciudades más frías de España. La nieve y las temperaturas extremas suelen hacer mella en Soria, lo que complicará la eliminatoria a los blancos.

Sin embargo, la semana del 10 de enero se disputará el partido de vuelta en el Santiago Bernabéu, donde el Real Madrid jugará con el público a favor para decidir el resultado de la eliminatoria. Una eliminatoria en la que su rival no tiene nada que perder y en la que el madridismo no pasaría por alto un nuevo contratiempo, como sucedió en Fuenlabrada.

Planteamiento de Zidane

En la eliminatoria contra el Fuenlabrada, Zinedine Zidane decidió sacar a la llamada unidad 'B'. Es decir, un equipo formado por los futbolistas menos habituales. El Real Madrid acabó sufriendo y viendo en jaque su pase a octavos de final de la Copa del Rey, por lo que el técnico francés deberá decidir si se la juega otra vez con los suplentes o si apuesta por el once de gala.