Ha terminado la fase de grupos y son muchas las sorpresas que han quedado en el camino para conocer a las diecisiés selecciones que estarán en los octavos de final de un Mundial que ha sido tan 'extraño' como emocionante. Si bien se han clasificado las grandes favoritas, también han decepcionado varios países que no han conseguido superar la primera etapa del torneo y que se han marchado a casa antes de lo que todos esperaban.
La primera gran sorpresa ha sido una Qatar que, a pesar de ser anfitriona, no consiguió sumar ningún punto en el grupo. Cayó en los tres partidos y firmó un saldo muy negativo de siete goles en contra, después de solo haber marcado uno. Ecuador, por su parte, no ha conseguido la clasificación después de una fase de grupos casi histórica en la que dejó la sensación de que se mereció mucho más.
Una de las grandes decepciones ha sido la Gales de Gareth Bale, de la que se esperaba muchísimo más a pesar de que era su primera participación en el Mundial. Solo sumaron un punto en tres partidos; recibieron seis goles y marcaron uno. En el grupo C, la gran sorpresa fue una México que estuvo a punto de robarle el puesto a Polonia en los octavos y que se naufragó en la orilla.
Del grupo D la gran decepción ha sido una Dinamarca que solo sumó un punto y quedó en evidencia, cuando en principio era la gran candidata a disputarle el primer puesto a Francia. Los daneses no estuvieron a la altura y dejaron mucho que desear, a pesar de que en la Eurocopa y Nations League habían dejado muy, muy buenas sensaciones. Peor es el caso de una Alemania que despertó muy tarde en búsqueda de su billete a octavos. Le hizo un favor a España, clasificada, pero se quedó a la espera de la respuesta de 'La Roja'.
¿Premio a Bélgica?
Además de las selecciones antes mencionadas, probablemente Bélgica se lleva el premio a la mayor decepción de la Copa del Mundo, puesto se quedó fuera en un grupo con Marruecos y Croacia. La derrota ante la selección marroquí les bajó de una nube, pero la realidad es que dejaron mucho que desear con sus actuaciones. La dimisión de Roberto Martínez fue la consecuencia directa, pero era algo más que esperable por lo que habían ofrecido.
De Serbia se esperó mucho más, pero estuvo contra una Brasil y Suiza muy competitivas, por lo que no es novedad que se haya quedado fuera. Sí lo es lo de Uruguay, que quedó eliminada 'in extremis' y fue castigada, en gran parte, por las decisiones arbitrales en su partido contra Ghana. Un gol le dejó fuera del Mundial.