La trayectoria de Aleix Vidal en el Barça no ha sido un camino de rosas, aunque, de momento, parece haberse acabado el calvario para el catalán. El lateral ha frenado sus malas sensaciones y ha cerrado de un portazo las opciones de salida del Camp Nou, rindiendo a buen nivel y ganándose la vitola de titular.

Sin ningún lugar a dudas, se puede decir que si hay un triunfador de la pretemporada azulgrana, ese es el de Puigpelat. Con la vuelta de Sergi Roberto al centro del campo, se presumía que su plaza en la defensa seria para Nélson Semedo, joven, con proyección y un fichaje específico para el puesto. Pero al portugués le esta pesando la camiseta en sus primeros días, y ha habido un compañero que lo ha aprovechado sin tardar.

Ante la que probablemente era su última oportunidad en el Barça, a Aleix Vidal no le ha temblado el pulso y ha demostrado con creces que está capacitado para ser una pieza importante en el once. Al fin y al cabo es ya su tercera temporada en la Ciudad Condal, a pesar de que en las primeras la suerte no haya estado de su lado.

A veces más descolgado, como contra la Juventus, o a veces más contenido para cerrar las aventuras ofensivas de Ivan Rakitic, como contra Chapecoense, el lateral ha rendido a un nivel muy alto, mostrando buena sintonía con todos sus compañeros de banda derecha y olvidando por completo la lesión que truncó su progresión sobre el césped.

Prueba Real

Tras varios ensayos amistosos, a Aleix Vidal -y a todo el equipo- le llega su primera prueba seria, un Real Madrid con el que el Barça se disputará la Supercopa de España. Las sensaciones han sido muy buenas durante toda la pretemporada, pero ahora toca refrendarlas con un triunfo en el primer título del curso. La campaña 2017/18 está a punto de empezar, y, de momento, hay algunos que ya llegan preparados.