Arturo Vidal se salvó de la quema contra el Liverpool: El chileno fue el mejor del Barça

Ernesto Valverde volvió a confiar en Arturo Vidal para jugar al lado de Sergio Busquets y de Ivan Rakitic en el centro del campo culé en Anfield. El 'Txingurri' sentó a Arthur, igual que en el Camp Nou, para jugar con el chileno en medio. Quería carácter, físico y personalidad, y Vidal le dio al equipo todo eso y muchísimo más en los 75 minutos que estuvo sobre el terreno de juego.

Se podría decir que el ex del Bayern de Múnich y de la Juventus fue el mejor del Barça en el encuentro y que fue de los pocos que dio la cara. El centrocampista fue un pulmón en el centro del campo y trabajó por tres durante todo el choque. Busquets y Rakitic no existieron y si el Barcelona aguantó al Liverpool en la primera mitad fue porque el de San Joaquín se multiplicó en tareas defensivas.

Recuperó balones, presionó la salida de los 'reds' y le dio el punto de carácter necesario al equipo para aguantar las embestidas de los ingleses. Además, con balón estuvo muy bien e hizo varios cambios de orientación de categoría. El chileno es trabajo, sacrificio, pundonor y carácter, pero también es un magnífico futbolista al que se ha infravalorado muchísimo desde su llegada al Barça.

Siempre dio la sensación de controlar el encuentro y nunca se puso nervioso ni con pelota ni sin ella. Con el 1-0 siguió corriendo en busca de la victoria y con el 2-0 y el 3-0 intentó aguantar a su equipo como pudo. Valverde decidió cambiarle en el 75 por Arthur en un cambio inexplicable que no ayudó precisamente a los barcelonistas a ganar.

El brasileño era necesario, evidentemente, pero Vidal estaba siendo el mejor y estaba jugando a un nivel muy superior al de Sergi Roberto, Rakitic y Sergio Busquets. Si alguien debía salir, no era él. Probablemente nada hubiera cambiado con el de Chile en el choque, pero al menos alguien hubiese seguido creyendo y corriendo en el medio para evitar el ridículo.

Vidal, infravalorado desde que llegó al Barcelona

Es cierto que le costó adaptarse al Barça, pero desde el primer momento hubo quien trató al ex del Bayern como si fuese un cualquiera. Nunca ha destacado por ser un virtuoso con el esférico, pero siempre ha demostrado estar bien dotado técnicamente. No es Arthur, ni 'Busi', ni Rakitic, pero suple su menor capacidad técnica con carácter, físico y un cambio de banda que no tiene ninguno de sus compañeros. En Anfield brilló en la noche más dura del Barça y se ganó una vez más el respeto de todo el mundo.