Pasan los días y la operación que debía llevar a Matthijs de Ligt al FC Barcelona sigue encallada. Si en abril el acuerdo estaba muy cerca de cerrarse, la revalorización del defensa en Champions League ha hecho que exija unas condiciones superiores a las pactadas inicialmente por las que en Can Barça no van a pasar y que el Paris Saint-Germain sí le ofrece.
Según las informaciones publicadas este viernes por Mundo Deportivo, en el FC Barcelona han llegado a la conclusión que "el problema que nos estamos encontrando con De Ligt es de humildad". De Ligt sabe que tiene unas grandes condiciones futbolísticas, que viene de hacer una gran temporada y quiere ser considerado como una estrella mundial.
Eso se traduce en dos condiciones impuestas por el capitán del Ajax sobre cualquier equipo que quiera contratarle. La primera es a nivel deportivo, ya que De Ligt exige a su futuro equipo ser titular indiscutible desde el primer momento y que se le otorguen los galones que tenía en el equipo de Ámsterdam, donde era completamente intocable.
Por otro lado, también exige un contrato con un salario a la altura de los mejores jugadores del planeta. A sus 19 años, es un futbolista con tremendas ambiciones deportivas y económicas pese a su juventud. Sin embargo, su arrogancia, negativa en el aspecto de intentar ficharle, también se considera positiva a nivel deportivo, ya que se mide a los mejores sin ningún tipo de complejo o timidez.
Ese nivel de ambición también lo marca el hecho de que De Ligt quiera contar con Mino Raiola como representante, un agente férreo y popular por conseguir para sus jugadores contratos millonarios. El problema viene cuando esa ambición le hace exigir condiciones por decreto, sin tener que ganarse en el campo al titularidad o su contrato de superclase. Lo quiere ya y ahora.
Comparación con De Jong
En el FC Barcelona no pasarán por el aro de De Ligt. De Jong llegó al club culé sin que se le asegurara ser titular indiscutible y bajo un contrato que le sitúa en el tercer escalafón salarial. Pero el defensa quiere cobrar más y tener el puesto asegurado. En el Camp Nou, sin embargo, consideran que De Jong es un jugador más influyente en el juego, por lo que sería incongruente ofrecerle mejores condiciones a su compatriota.