Ilaix Moriba se está convirtiendo en un quebradero de cabeza para el FC Barcelona, que no consigue la 'fórmula' para renovar su acuerdo más allá del verano de 2022. El talentoso centrocampista de 18 años, una de las 'joyas' de la cantera azulgrana, no ha aceptado las condiciones del acuerdo que el Barça ha puesto sobre la mesa y se resiste, mientras los blaugrana le castigan deportivamente. 

La decisión del club es clara y no se modificará: renueva o no juega. El primer paso de los culés fue dejarlo fuera de la convocatoria para los entrenamientos del primer equipo (un gesto que no convence a Koeman), pero se 'lanzaron' más allá y tampoco le dejaron participar en el primer partido amistoso del filial en la pretemporada. Son medidas que, sin lugar a dudas, pueden ser de doble filo para el Barça. 

Y es que la realidad es que es un 'castigo', de cierto modo, innecesario. Ilaix nunca ha dejado dudas de su calidad deportiva, razón por la que exige que mejoren las condiciones de su nuevo acuerdo (sería hasta el 2026). El Barça, sin embargo, mantiene su postura y, si las cosas siguen como van hasta ahora, podrían ser víctimas de la 'fuga' de uno de los jugadores más talentosos que han salido de La Masia en los últimos años. 

Para evitarlo, los directivos han agendado una nueva reunión con los representantes del futbolista de 18 años, este lunes, para ponerle fin al 'culebrón' de su renovación. El club azulgrana ofrecerá el contrato a largo plazo (hasta la temporada 2025-2026) y espera que las negociaciones definitivas arranquen esta misma semana, según 'SPORT'. No obstante, mantienen su postura y no ofrecerán un pago de 'crack' porque entienden que aún no ha demostrado nada. 

Ilaix también aprieta por su renovación

El Barça no es el único que quiere terminar las negociaciones rápido y satisfactoriamente. 'SPORT' también añade que Ilaix Moriba pretende cerrar este ciclo y ha pedido a sus representantes hacer todo lo posible en esta última cumbre para llegar a un acuerdo tan pronto como se pueda, así que lo más probable es que en breve pueda resolverse uno de los grandes problemas que se ha conseguido Joan Laporta y compañía en este verano.