El FC Barcelona terminó la pasada temporada cayendo en Champions contra el Liverpool de manera estrepitosa y perdiendo la final de Copa del Rey ante el Valencia. Ganar la Liga no fue suficiente premio para una afición culé que ya pidió la cabeza de Ernesto Valverde entonces. El club, a pesar de todo, no se dejó arrastrar por la corriente y confió en el entrenador de cara a esta campaña.
Pero el curso empezó igual de mal que terminó y los culés cayeron en Bilbao en su estreno. Desde entonces, luces y muchas sombras de un Barça que ahora mismo no es reconocible y que está dejando muy malas sensaciones. El empate a cero contra el Slavia de Praga fue otro motivo más para que los aficionados cargaran contra un 'Txingurri' en horas bajas.
A pesar de todo, parece que desde el Barcelona siguen confiando en él y así se lo confirmó el propio Josep Maria Bartomeu en la comida que ambos tuvieron esta semana. Según Mundo Deportivo, el presidente del Barça quiso tranquilizar a su técnico para acallar los rumores que no dejan de salir sobre posibles sustitutos.
El propio Valverde confirmó que comió con Bartomeu y que siente y siempre ha sentido el respaldo del club. Parece que en la directiva creen que esta mala racha pasará y que el equipo va a mejorar y va a empezar a ganar partidos como antaño. El pesimismo no se ha apoderado aún de la Junta y esta temporada no dudan de que el técnico culé podrá darle la vuelta a la situación.
Lo que ya no está tan claro es lo que sucederá en el verano de 2020. El de Viandar de la Vera tiene contrato hasta entonces, pero hay una cláusula que permitiría alargarlo una temporada más. En estos momentos, ni el entrenador barcelonista ni el propio club tendrían claro si ejercer o no esta ampliación.
El vestuario también confía en Valverde
En el vestuario, tal y como señaló el diario MARCA, también hay confianza plena en Valverde y en darle la vuelta a la tortilla. Los pesos pesados del equipo siguen creyendo que el extremeño es el hombre indicado para el puesto y confían en él. La continuidad de Valverde parece estar casi asegurada este curso y solo un desastre tremendo podría hacer que el Barça decida prescindir de él antes de verano.