El Clásico 'intrascendente' terminó en empate. FC Barcelona y Real Madrid se jugaban el honor de derrotar al eterno rival en una Liga que ya estaba decidida matemáticamente, aunque eso no le restó intensidad al choque. Luis Suárez y Leo Messi fueron los autores de los goles azulgranas, mientras que Cristiano Ronaldo y Bale marcaron para los blancos.

Una de las grandes polémicas antes de que se disputase el partido fue la decisión del Real Madrid por mediación de su técnico, Zinedine Zidane, de no hacer el pasillo de los campeones al FC Barcelona por haberse proclamado ganador de LaLiga Santander, una tradición que se rompió este domingo tras muchos años de ser seguida.

Tras acabar el partido, los jugadores del FC Barcelona volvieron a saltar al césped para celebrar el 'doblete' con sus aficionados y fue ahí donde Gerard Piqué tomó el micrófono para lanzar un mensaje al staff técnico con una clara connotación de indirecta al Real Madrid, que no hizo el pasillo antes del partido.

"Como no nos han querido hacer el pasillo, le pido a nuestro staff que nos lo haga y con eso ya nos vamos", dijo Gerard Piqué durante la celebración. Fue un mensaje simpático para el staff, pero una clara indirecta a un Real Madrid que rompió con la deportividad de una tradición que se ha mantenido a lo largo de los años.

El Piqué más tenso

"Este es el pasillo de los hombres que cuidan del Barça", comentó también el central blaugrana, que fue protagonista de algunos momentos de tensión en el túnel de los vestuarios junto a Nacho y a Sergio Ramos, defensas del Real Madrid. El caldeado partido invitó a Gerard Piqué a dirigirse al eterno rival en la celebración.

Todo ello llegó a raíz de la expulsión de Sergi Roberto, que fue interpretada como muy rigurosa tras golpear a Marcelo. La acción llegó instantes después de una tremenda agresión de Gareth Bale a Samuel Umtiti, algo que ayudó a intensificar la tensión de los jugadores.