Todo hacía presagiar que la de este miércoles sería otra noche para olvidar para el FC Barcelona y el barcelonismo cuando apareció un hombre del que se hablará mucho en un futuro no muy lejano. Perdían los azulgranas ante el Hércules CF tras recibir un tanto a raíz de un desastre defensivo que empezó por Aleix Vidal y acabó por Digne, pasando por Borja López. Sin embargo, a penas cinco minutos después llegó Carles Aleñá.

La perla del filial azulgrana pidió la bola con autoridad en el centro del campo. El capitán Rafinha se la cedió y, a eso de 30 metros de distancia del arco, acabó sacándose un zurdazo que parecía más un zarpazo de un león que un chut de un futbolista. Gran gol del crack de Mataró que comenzó así a inscribir su nombre en la historia del Barça.

Aunque todavía es muy temprano para saber si llegará a tener una incidencia en el primer equipo como Sergi Roberto, Iniesta o el mismo Rafinha, el "rizos" fue por primera vez determinante en el equipo de Luis Enrique. Tremendo gol del maresmense que contagió a los suyos.

Un tanto que llegó en su primer partido oficial con el cuadro blaugrana, esta noche de verde degradado. Él junto con Alex Carbonell y Borja López debutaban saliendo desde el inicio ante los alicantinos. A ellos se sumaría el canario Nili Perdomo en el segundo tiempo.