"Sin ella, no hubiera hecho esta sesión de fotos ni borracho", comienza diciendo Carles Puyol en la entrevista y sesión fotográfica que concedió junto a su mujer Vanesa Lorenzo para "La Vanguardia". Una sesión que dejó claro lo que todos intuían: "¡Lo que hace el amor, yo soy muy tímido!".

"Puyi" comenzó hablando de sus orígenes y de cómo luchó por todo desde sus inicios en la cantera del Barça. "Yo siempre lo daba todo, podía haberme dosificado, pensar más en mí, pero me entrego", explicó.

"Yo era un enfermo del Barça. Antes, cuando perdían, no cenaba. Era un drama", dijo el exfutbolista entre risas. Posteriormente explicó cómo fue ser un hombre de Guardiola. "Para mí no fue duro con Guardiola, no me tenía que exigir nada. Él quiere entrenamientos cortos y máxima intensidad. Técnicos así te alargan la carrera...", sostuvo.

Carles Puyol se queda con Rijkaard

Un Puyol que, de quedarse con un entrenador por su lado personal, lo hace con Frank Rijkaard. "No tuve mentores, pero sí grandes entrenadores: como persona me quedaría con Rijkaard", confesó.

Puyol fue durante muchos años capitán del equipo azulgrana, pues el brazalete ya lo llevaba en tiempos del técnico holandés. Dio las claves para hacerlo: "En el vestuario hay 25 jugadores, 25 egos juntos. Todos se sienten los mejores y quieren jugar. (Como capitán) hay que hacer entender que las normas son iguales para todos. Humildad ante el éxito y fuerza ante el fracaso. Es el mensaje que transmito los jugadores a los que represento".

Finalmente se arrepiente de haber tenido una carrera tan corta por culpa de sus infortunios. "Para mí mi carrera ha sido corta. Yo en vez de estar haciendo esta entrevista ahora seguiría jugando. Pero las lesiones me lo impidieron", concluyó.