El FC Barcelona está pasando apuros importantes en los partidos disputados en las últimas semanas. El Espanyol consiguió vencer a los azulgranas en Copa del Rey y empatar en Liga, algo parecido a lo que sucedió en el Camp Nou contra el Getafe, con unas nuevas tablas. El partido de Champions League contra el Chelsea, en el que los londinenses fueron superiores, encendió las alarmas.

Ernesto Valverde debe buscar soluciones y hacerlo pronto, ya que el FC Barcelona se juega la temporada en los próximos meses y se ve al equipo con bastantes más apuros que tenía antes de enero. El mercado de fichajes se cerró hace un mes y el Txingurri debe dar con la tecla en su plantilla que le permita recuperar el buen juego y los resultados positivos.

Una de esas teclas podría ser la de volver al 4-3-3 habitual desde hace varias temporadas. La marcha de Neymar provocó un cambio de sistema que funcionó a la perfección en los primeros meses de la temporada, pero en las últimas semanas el equipo ha bajado el rendimiento de forma alarmante, hasta el punto de ser dominados por el Chelsea en Stamford Bridge.

Ventajas del Barça con el 4-3-3

El FC Barcelona podría mejorar su juego usando el esquema habitual que ha llevado al equipo a grande séxitos en temporadas anteriores. Para que esto suceda, es fundamental que jugadores como Ousmane Dembélé o Philippe Coutinho den un paso al frente y demuestren que están para jugar junto a Luis Suárez y a Leo Messi en un nuevo tridente. 

El 4-3-3 generaría más profundidad por las bandas, por lo que sería más fácil abrir el campo ante defensas fuertes. Por otra parte, favorecería la posición de Ivan Rakitic, que es uno de los centrocampistas más completos del mundo tanto en ataque como en defensa pero que a veces no puede sacar a relucir su potencial ofensivo por quedarse demasiado anclado en la medular.