El barcelonismo celebraba este martes que varios de sus jugadores habían optado por acortar sus dos días de fiesta y habían preferido acudir a la Ciutat Esportiva de Sant Joan Despí para entrenarse. Uno de estos es un Andrés Iniesta que no vive su mejor año en Can Barça pero que lucha con todas sus fuerzas para revertir su suerte.

Pues de esos se trata todo, de suerte. Esa que le ha hecho caer en desgracia esta estación en cuanto a lesiones e infortunios se refiere. Una de estas le dejó fuera del último partido frente al RCD Espanyol, un duelo para el que tenía mucha ilusión puesta. Eso no quiere que vuelva a ocurrir en los cuatro partidos que quedan este curso.

Sabe que es insustituible en su equipo y que Luis Enrique ha tratado de mimarlo este año para que se perdiese cuantos menos partidos mejor. Ahora, los suyos le necesitan para guiarlos ante el Villarreal, Las Palmas, Eibar y Alavés. 

El Barça, a por el doblete con Iniesta

Cuatro partidos donde los azulgranas se juegan dos títulos (Liga y Copa). El que se plantea más difícil, el del próximo sábado, también le motiva. Volver a enfundarse el brazalete de capitán y repartir juego como hizo ante el Real Madrid en el Bernabéu. Un gran partido para el de Fuentealbilla que espera repetir. Y es que cuando Iniesta no está, los suyos le echan mucho de menos.