El caso de Rafinha Alcántara es algo rocambolesco en la presente temporada, por la tremenda irregularidad que está experimentando el jugador en relación a la confianza de Ernesto Valverde en él. En ocasiones parece que es un jugador importante y en muchas otras desaparece de las alineaciones e incluso de las convocatorias.
Rafinha empezó siendo un jugador importante en el equipo. Después de su gran rendimiento en la pretemporada, tuvo oportunidades de inicio que empezaron a disiparse con el tiempo. Cuando Leo Messi se lesionó, y de forma inesperada, el hispano-brasileño volvió a la titularidad teniendo un papel importante.
No obstante, volvió a desaparecer de las alineaciones de Ernesto Valverde en los dos últimos partidos, el de Champions League frente al Inter de Milán y el de LaLiga Santander contra el Real Betis. en este último, incluso llegó a caer fuera de la lista de convocados del Txingurri, que prefirió optar por otras opciones como Denis Suárez o Carles Aleñá.
Todo ello provocó el enfado de Mazinho, padre y representante del jugador. "Es una cosa de locos, no se entiende nada. Solo el entrenador sabe lo que tiene o no tiene. La vedad es que nosotros intentamos que Rafa tenga una situación regular de jugar. Aquí cuando tienes tres partidos seguidos, luego se corta. El entrenador tiene en su cabeza su forma de trabajar, pero para el jugador, ya está bien. Ha hecho una muy buena pretemporada, partidos espectaculares, y no se entiende", dijo, en declaraciones a 'Galicia Sport'.
El Barcelona no quiere vender a Rafinha
Según las informaciones de varios medios nacionales y avanzado por RAC1, en el FC Barcelona causaron sorpresa las declaraciones de Mazinho. De hecho, según dicho medio, el club azulgrana no se está planteando la marcha del jugador en enero ya que le considera una pieza importante del proyecto en la presente temporada.
No obstante, los hechos parecen distintos. El jugador es muy intermitente en sus apariciones con el primer equipo y ve como la competencia en su puesto cada vez es más fuerte, debido a la irrupción de Carles Aleñá. Si el hispano-brasileño sigue sin jugar con regularidad, se avecina conflicto entre ambas partes.