Penúltima jornada liguera del 2017 y en el FC Barcelona ya empieza a oler a Clásico. Antes de la decisiva visita al Santiago Bernabéu toca afrontar la llegada del Deportivo de la Coruña, y aunque todo apunta a que será un compromiso más sencillo, no hay lugar para las confianzas. Los gallegos ya han dado algunas sorpresas.
El conjunto blanquiazul aparece a una semana del Real Madrid como el adversario deseado: Apenas 4 victorias en 15 partidos y en 17ª posición, justo en la frontera con la zona de descenso. Escenario ideal para rotaciones y descansos antes de viajar a la capital, pero como ha avisado Ernesto Valverde, no será un partido sin riesgos.
De hecho, el último encuentro entre catalanes y coruñeses fue para los últimos (2-1), en una horrible noche en Riazor que empezó a dejar LaLiga en manos de los de Zinedine Zidane. Pero no ha sido el único. En sus últimos 10 enfrentamientos, el Barça acumula 6 victorias, además de la citada derrota y 3 empates, 2 de ellos en los tres últimos duelos en el Camp Nou.
Rotaciones con medida
Es por ello que no se espera una revolución en el once que el Barça presentará este domingo. Valverde hará algunos cambios, pero con medida. "Los puntos valen lo mismo los del Bernabéu, como los otros", ha advertido el Txingurri, que también ha calificado al Dépor como un "equipo peligroso". Habrá varios jugadores que descansarán de cara a la cita del Clásico, pero ni mucho menos se permitirán confianzas con un adversario al que hay que confirmar como sencillo.