A diferencia de otros viajes, el FC Barcelona llegó a su hotel de lujo situado a las afueras de Gijón casi "de extranjis", con tan solo siete aficionados esperando a fuera del complejo a su llegada. La expedición encabezada por Luis Enrique llegó desde el Aeropuerto de El Prat al de Ranón (Asturias), donde sí que esperaban aficionados que se lo han pasado en grande antes del Sporting-Barça.

Pues las estrellas, así como el entrenador del conjunto culé, se pararon para fotografiarse y firmar autógrafos con los aficionados jóvenes y no tan jóvenes que esperaban su llegada a la tierra asturiana. Un viaje, el del equipo culé, que se dio un día antes de la disputa del mismo, a diferencia de lo que suelen hacer los catalanes que suelen viajar el mismo día de partido.

Y si bien el Barça se iba de Catalunya con un día oscuro y en el que la lluvia había hecho acto de presencia, llegó a Asturias con un día primaveral. Algo que choca dada la dureza climática que acompaña a esta tierra del norte de la Península Ibérica. La vicepesidenta de la entidad Susana Monje estuvo junto a la expedición.

Y con ella también viajaron los directivos Ramon Pont y Pau Vilanova, que junto al popular "Avi Barça" Joan Casals y Ramon Barriol participaron en el Encuentro de peñas Barcelonistas de Asturias y Cantabria.