El FC Barcelona regresa este sábado a los entrenamientos con la premisa de prepararse lo mejor posible de cara a los próximos retos que tiene marcados en el calendario, y que servirán para evaluar si el excelente estado de forma que atraviesan los culés se mantiene después de la Navidad.

El objetivo del Barça será iniciar el año 2018 como terminó 2017: a lo grande y ganando partido tras partido. En LaLiga Santander la clasificación está muy encarrilada, pero aun así los de Ernesto Valverde desearán seguir encadenando victorias para no ver reducidas las diferencias en la tabla y, además, mantener el optimismo por las nubes de cara a las fechas clave de la temporada.

Los de Valverde, eso sí, tendrán un calendario de lo más apretado. Y es que podrían llegar a jugar hasta 12 partidos en 39 días, uno cada tres o cuatro días, siempre y cuando vayan avanzando de ronda en la Copa del Rey 2017-18, cuyos octavos de final disputarán frente al Celta de Vigo a partir de este jueves 4 de enero, cuando tendrá lugar el partido de ida en Balaídos.

Calendario complicado para el FC Barcelona, pero que no debe ser un problema teniendo en cuenta que los jugadores culés están más que acostumbrados a este tipo de situaciones, y que esta temporada 2017-18 el Barça tiene una profundidad de plantilla que no tenía antaño, y que permitirá a Ernesto Valverde mover con libertad las alineaciones para dar descanso a todos los jugadores.

Valverde quiere que todos estén enchufados

Si consigue hacerlo tan bien como hasta ahora, el 'Txingurri' mantendrá enchufados a todos los jugadores y hará que se sientan más o menos importantes. Podrá contar en este 2018 con Dembélé y Rafinha Alcántara, a la espera de que el brasileño pueda hacer las maletas y de que llegue también algún que otro nuevo refuerzo, como por ejemplo Coutinho y Yerry Mina.