El Clásico aparentemente 'intrascendente' terminó en empate. FC Barcelona y Real Madrid se jugaban el honor de derrotar al eterno rival en una Liga que ya estaba decidida matemáticamente, aunque eso no le restó intensidad al choque. Luis Suárez y Leo Messi fueron los autores de los goles azulgranas, mientras que Cristiano Ronaldo y Bale marcaron para los blancos.

Antes de empezar el encuentro, el público del Camp Nou recibió a los jugadores como se merecían por haber obtenido el 'doblete': con un espectacular mosaico en el que se podía leer una frase muy significativa en referencia a la gloriosa década de fútbol y títulos que el equipo lleva: "La pelota nos hace campeones".

Mientras el público del Camp Nou lucía el espectacular mosaico, los aficionados interpretaron a capela el himno del FC Barcelona. En los prolegómenos del partido, además, los más de 90.000 espectadores que abarrotaban las gradas del coliseo culé ondearon banderas azulgranas al grito de "campeones, campeones".

Un Clásico muy intenso

Pese a que ninguno de los equipos no se jugaba nada, ambos respondieron dando lo mejor de si en un espectáculo de estas características. El partido fe especialmente intenso y los dos conjuntos tuvieron buenas ocasiones para llevarse el triunfo. Además, el partido fue por fases de dominio alternas ese a que el Barça jugó una parte entera con un jugador menos.

Luis Suárez abrió el marcador a los 10 minutos de juego conectando una espectacular volea a centro preciso de Sergi Roberto. Sin embargo, no iba a durar demasiado la alegría, ya que Cristiano Ronaldo pondría el empate con un remate a bocajarro tras una asistencia de Karim Benzema.

Antes del descanso, Sergi Roberto había sido expulsado, algo que no evitó que el FC Barcelona se volviese a poner por delante en el marcador gracias a una genialidad de Leo Messi. Sin embargo, el equipo madridista volvió a igualar la contienda gracias a otro golazo de Gareth Bale. El arreón final del Madrid, sin embargo, no valió para romper la imbatibilidad del Barça.