Neymar regresó anoche al Aeropuerto de El Prat de Barcelona tras pasar un día de fiesta en Ibiza junto a su nuevo amigo Draymond Green, jugador de los Golden State Warriors, franquicia de la NBA. Y el brasileño estuvo muy amable con los aficionados, pero no hizo ninguna declaración. 

Poco después de abandonar el aeropuerto, el padre y agente del futbolista tampoco quiso efectuar ningún comentario al rumor, difundido horas antes por un prestigioso periodista brasileño a la prensa de su país en la que afirmaba que el PSG pagaría la claúsula de 222 millones de euros. 

Según se explicó anoche en el 'Tu diràs' de "RAC1", el padre de Neymar "ha comprado un billete para ir el miércoles a París". No pudieron certificar si el viaje es por puro placer o si está relacionado con las negociaciones, pero en estos momentos hace que se enciendan aún más todas las alarmas.

Un silencio que aumenta la intriga en relación al futuro de Neymar, pero que no debe ser tomado demasiado en serio, pues es la misma estrategia trazada por la familia de Neymar cada vez que se ha hablado de una salida del club. Tras ignorar por completo a los reporteros se subió a su coche y las únicas palabras que les dedicó fueron "adiós y buenas noches".

¿Sería el mejor del mundo fuera?

Es la gran pregunta que se hacen en el entorno del jugador brasileño. Y nosotros creemos que no.  Aquí puede aspirar a todos los títulos y ser reconocido mundialmente como uno de los mejores. ¿Aspiraría a todo eso en el PSG y en una liga en la que apenas hay rivales?