Aunque los partidos de pretemporada no sirven para sacar conclusiones definitivas, siempre es mejor ganar y dejar buenas sensaciones, y eso es lo que está haciendo el Barça. Su participación en la International Champions Cup está siendo prácticamente impecable, y Ernesto Valverde ha ido puliendo conceptos a los que ya esta viendo resultado.

El Txingurri quería hacer de los azulgrana un equipo tan vistoso como intenso, y de momento en dos encuentros que ha dirigido ha logrado que sus hombres combinen sus mejores facetas ante dos rivales tan temibles como la Juventus y el Manchester United. El esfuerzo defensivo de toda la plantilla ha servido para que los porteros pasen pocos apuros, y de no ser por un error puntual, Jasper Cillessen y Adrián Ortolá mantendrían su hoja de servicio en blanco.

La presión empieza desde la delantera y esto lo agradecen los zagueros, a los que se ha visto más atentos, rápidos y efectivos que en los últimos meses. El único borrón lo puso Giorgio Chiellini, y su gol llegó tras un balón parado en el que hubo una falta de entendimiento entre Marlon Santos y Umtiti. Habrá que esperar para ver si la mejora es un síntoma puntual o una seña distintiva de nuevo Barça de Valverde, pero de momento la cosa promete.

Pensando en el Real Madrid

Cuando todavía queda mucho trabajo por delante, el Barça ya se ha marcado un nuevo objetivo a corto plazo, y no es otro que continuar su buena racha con una victoria en el último amistoso en los Estados Unidos. El adversario además, es el Real Madrid, por lo que un triunfo serviría para cerrar la pretemporada con un buen sabor de boca.

Precisamente, los blancos serán el primer rival de los azulgrana en la lucha por un título oficial, cuando se enfrenten a doble partido en la eliminatoria que decidirá el campeón de la Supercopa de España. Durante estos días los catalanes deberán mantener sus buenas sensaciones para conseguir imponerse a un equipo que no pondrá las cosas fáciles.