En los últimos partidos, Ousmane Dembélé ha explotado con un impresionante rendimiento que le ha hecho colgarse el cartel de titular indiscutible en una delantera en la que Leo Messi y Luis Suárez tienen un puesto fijo. El auge del francés ha hecho que Philippe Coutinho, habitual en las alineaciones hasta hace poco, haya perdido su puesto.

La situación del brasileño era impensable hace unos meses, cuando su puesto en el once era totalmente fijo. Ahora, Coutinho, que solía ocupar el extremo izquierdo, ha visto como Dembélé le ha arrebatado dicha posición gracias a su espectacular rendimiento. Las opciones del ex del Liverpool se han reducido considerablemente.

Si Ousmane Dembélé sigue jugando a un nivel tan alto, la única posibilidad que se plantea para que Coutinho recupere el sitio es cambiarle de posición y volver a apostar por él en el centro del campo, donde jugaba al principio de temporada y donde tuvo un mejor rendimiento.

No obstante, tampoco lo tendrá fácil para hacerse un hueco en la medular, ya que futbolistas como Arthur Melo o Arturo Vidal vienen pisando muy fuerte. La gran ventaja de Coutinho es su polivalencia, pudiendo ocupar tanto la posición de interior como la de extremo, aunque si no vuelve a su nivel de hace unas semanas lo va a tener complicado.

Coutinho, ¿destinado a jugar de interior?

Al principio de la presente campaña, Philippe Coutinho pasó de jugar de interior izquierdo junto a Ivan Rakitic y a Sergio Busquets en un centro del campo de tres y su rendimiento estaba siendo muy bueno. Es cierto que le faltaba ajustar matices defensivos, pero era cuestión de tiempo que lo acabase asimilando.

La posición más habitual de Coutinho siempre había sido la de mediapunta, en la que podía explotar su creatividad y su capacidad ofensiva. Desde la posición de extremo, le cuesta mucho más sacar a relucir todas sus armas. No obstante, como interior, sería un jugador que participaría mucho más de la creación. Robert Fernández lo fichó como relevo de Iniesta y, si Dembélé sigue pisando tan fuerte, el brasileño se verá obligado a emular al manchego.