El fichaje del cuarto delantero, Paco Alcácer, fue sin lugar a dudas la operación más costosa para el FC Barcelona, no tanto a nivel económico sino negociador. Después de perder las opciones claras de Vietto y Gameiro, al conjunto blaugrana se le abrieron diferentes y distintas posibilidades a la hora de reforzarse en esa demarcación. A la opción de Paco Alcácer le aparecieron otras al otro lado del Atlántico. Gabriel Jesus, "Gabigol" o Luan fueron algunos de los que sonaron pero que, finalmente, no acabaron de gustar a Robert.

Al final el FC Barcelona se decantó por Paco Alcácer, y ayudó mucho la predisposición del propio jugador a recalar en el Camp Nou. El jugar en un club como el FC Barcelona da al futbolista una ocasión de crecimiento tanto personal como deportivo brutal. Jugar ante tantos aficionados, luchando siempre por todos los títulos posibles y al lado de jugadores de tanta calidad hacen que esta opción sea la única y mejor.

Está claro que otra razón importante en la decisión final de Alcácer fue el salto en el nivel salarial al llegar al Camp Nou. Junto al ascenso de su salario anual existen una serie de bonus que hacen de ese contrato su atractivo. Si bien los hay individuales que van por partidos jugados y goles, también los hay colectivos, como son los que se consiguen por la obtención de títulos a lo largo del curso.

Y Alcácer, además, tenía otra cosa clara: ¿Quién puede decir que puede aprender de los tres mejores delanteros del mundo en los entrenamientos? ¿O compartir vestuario y alineación con alguno de ellos? De buen seguro que al delantero de Torrent la oportunidad de estar al lado de Leo Messi, Neymar Júnior o Luis Suárez le ha hecho aceptar el ofrecimiento. Conversar con ellos, que le ayuden a mejorar y aprender de sus movimientos y su inteligencia es crucial para el devenir de su carrera.

Y, por último, está el hecho de salir de la zona de confort. A Luis Enrique le gusta Alcácer por su inteligencia efectiva, movimientos, asistencias y goles. "Lucho" podrá sacar lo mejor de un Paco Alcácer que en caso de haberse quedado en Valencia podría haber caído en el estancamiento. Hace tiempo que Ayestarán anunciaba que el punta estaba en una "zona de confort" al tratarse del club de toda su vida y de no tener competencia real por su puesto. Ahora le tocará sudar, trabajar y "robarle" el mayor número de minutos posibles a Luis Suárez y al resto de mega estrellas culés. Este jueves, Alcácer será presentado al fin ante el barcelonismo.