Como parte de una planificación realizada por Abidal y Cury, Matheus Fernandes llegó al FC Barcelona procedente del Palmeiras a cambio de siete millones de euros más variables. El centrocampista brasileño de 23 años nunca fue presentado de manera oficial, aunque fue parte de la plantilla durante la temporada que acaba de terminar.

Tampoco vio acción durante la Copa del Rey, aunque sí recibió la confianza por parte de Ronald Koeman para salir al campo durante 17 minutos en el encuentro de la fase de grupos frente al Dinamo de Kiev, por lo que sí llegó a debutar formalmente con la camiseta azulgrana.

Sin embargo, se desconocen las razones por las cuales el club catalán no hizo pública su incorporación, siendo Eric Abidal y André Cury, para entonces secretario técnico y encargado del club en América, respectivamente, los únicos que tendrían conocimiento de la situación.

El Barça buscará negociar su rescisión

El brasileño mantiene su vínculo con la entidad catalana hasta el verano de 2025 con una cláusula de rescisión cuyo importe se eleva a los 300 millones de euros. No obstante, se estima que el jugador no traería aportes significativos al club, por lo que será preciso ponerlo en venta.

Según apuntó La Vanguardia en uno de sus reportajes, en unas declaraciones del entonces director deportivo del Palmeiras, Alexandre Mattos, habría pedido a Cury contactar a Abidal para echarle un vistazo al jugador: “Cuando vino le dije ‘mira el número 35’. En ese momento, me llamaron loco. ¿Quieres vender al Barça un jugador que juega poco en el Palmeiras?. Y Matheus Fernandes se convirtió en jugador del Barça el último día del mes de enero de 2020”.