El FC Barcelona asedió la portería de Nauzet durante los primeros 30 minutos de juego en El Sadar, pero no consiguió que las oportunidades de gol de Luis Suárez, Leo Messi, Arda Turan y compañía acabaran fructificando en agua clara para el Barça, sin subir al marcador.

El Barcelona no se puso nervioso y siguió acercándose con peligro a la portería de Osasuna, pero, a medida que las ocasiones fueron sucediéndose sin fortuna para el bando azulgrana, algunos jugadores culés sí empezaron a enrabietarse y frustrarse.

Fue el caso de Leo Messi y Luis Suárez, quienes tuvieron en sus botas varios manos a manos con el portero de Osasuna, el charrúa enviando además un disparo al palo. En total, el FC Barcelona disparó 11 veces en la primera mitad por tan sólo 2 de los locales, una estadística que deja bien claro el asedio sufrido por los navarros durante los primeros 45 minutos.

Sin embargo, el hecho de que el marcador se mantuviera a cero, además del ánimo de la grada de El Sadar, propició que Osasuna se fortaleciera cada vez más atrás y fuera capaz, incluso, de protagonizar algún que otro acercamiento peligroso hacia la portería de Ter Stegen.

Si el FC Barcelona quiere encadenar pronto una buena racha de resultados y victorias consecutivas, deberá mejorar sobre todo en la definición de cara a puerta. Precisamente una de las máximas del fútbol es esa: "Si desaprovechas las ocasiones, puedes acabar pagándolo caro".