Llegó hace unos meses y ha causado sensación en el FC Barcelona, que va viento en popa y no ha perdido en lo que va de temporada oficial. Paulinho es uno de los artífices del gran arranque del conjunto catalán, pero además puede presumir de haber ganado otro título. El brasileño vuelve a ser campeón de Liga con el Guangzhou Evergrande.

No es una situación muy habitual, pero en este caso se da la curiosa circunstancia que el centrocampista no levantará el trofeo, al formar parte de otro equipo en el mismo curso en el que ha sido pieza importante de la plantilla que ha ganado el campeonato. De los 28 partidos disputados hasta el momento -de los 30 totales-, el de Sao Paulo participó en 20 de ellos, siendo titular en todos y dejando además 7 goles.

A falta de dos jornadas, el Guangzhou se ha asegurado matemáticamente una victoria que aumentará el palmarés de Paulinho, ganador en tres ocasiones consecutivas de la Liga china, además de la Champions asiática a finales de 2015 y dos Copas de China.

Convencido del paso

A pesar de tratarse de varios logros en competiciones de menor nivel, el paso por el fútbol oriental no le ha sentado nada mal a Paulinho, que volvió a Europa convertido en una referencia de la 'canarinha'. Palmarés aparte, el brasileño ha logrado hacerse un hueco en los exigentes esquemas del Barça, donde no sólo no desentona, sino que ha impuesto sus propias características.