Tras un empate gris contra el Nápoles (1-1) en el partido de ida de los octavos de final de la Champions League, se esperaba una pequeña revolución de Quique Setién en la alineación de cara al Clásico. De hecho, el técnico cántabro incluso había probado en los partidillos de entrenamiento con Martin Braithwaite como titular junto a Leo Messi y Antoine Griezmann, pero finalmente el once fue muy parecido al de San Paolo.

Setién solamente introdujo dos cambios: Dio entrada a Jordi Alba -ya recuperado de su lesión muscular- por Junior Firpo -muy verde y cohibido durante la ausencia del catalán- y puso a Arthur Melo por Ivan Rakitic en el centro del campo. Arturo Vidal repitió esa posición de falso extremo izquierdo en la que está jugando en las últimas semanas y Samuel Umtiti volvió a ganarle la partida a Clément Lenglet en el eje central.

Con la entrada de Jordi Alba y manteniendo a Arturo Vidal, Setién intentó mantener la intensidad y las llegadas por sorpresa desde segunda línea mientras que, con Arthur sobre el césped de Chamartín, el cántabro buscó tener el balón y facilitar la salida desde atrás. Un plan conservador que minimizó riesgos y se alejó de las sorpresas con las que se especulaba tras el empate de Nápoles.

Eder Sarabia, segundo entrenador de Setién, explicó en declaraciones para Movistar LaLiga y Barça TV previas al partido que la alineación azulgrana se decidió en consecuencia a lo visto en el Clásico de la primera vuelta, hace poco más de dos meses. “Nos tomamos como referencia el partido de ida, tiene impulsos y arreones difíciles de controlar, a ver si imponemos nuestro plan. Hay que ser valientes con balón, ser profundos, pero también saber replegarse”, explicó.

Por otro lado, no se mostró sorprendido por la bomba de Zidane en la alineación del Real Madrid: el banquillazo de Ferland Mendy y la titularidad de Marcelo. “No me sorprende porque todos son jugadores extraordinarios y nos van a complicar el partido. Marcelo puede tener más calidad en los últimos metros y ser algo más débil en defensa, pero puede pasar algo parecido con otro que hubiera jugado”, manifestó.

Un Clásico que no es decisivo

La igualdad en la parte alta de la tabla​ hace que el duelo de este domingo no sea definitivo, ya que todavía quedan pendientes 12 jornadas, y así lo expresó Sarabia antes del duelo. “Este Clásico no será definitivo pase lo que pase, queda mucha Liga, pero venimos concienciados y motivados”, sentenció. El campeonato doméstico, por tanto, seguirá vivo hasta el final.