Además de un FC Barcelona que cumplió a la perfección su papel en La Rosaleda, uno de los protagonistas de la victoria azulgrana contra el Málaga fue Samuel Garcia, que se tuvo que marchar a la media hora de partido por una patada salvaje a Jordi Alba que le costó una expulsión. Ya en frío, el centrocampista reaccionó.

Samuel García pide disculpas a Jordi Alba

A pesar de que sobre el terreno de juego su primera decisión fue protestar la decisión de Martínez Munuera, tras el encuentro se disculpó públicamente con el lateral, con los aficionados y con sus compañeros. Su mensaje no ha acabado de convencer a todos los seguidores blanquiazules, pero al menos ha zanjado una polémica que al catalán le pudo costar cara.

"Quiero pedir disculpas a la afición, mis compañeros y a Jordi Alba... Mi intención en todo momento es tocar balón. Jamás he sido jugador de dar una patada fuera de lugar. Me voy triste por la situación del equipo...", comentó el jugador malagueño a través de las redes sociales.

Jordi Alba se libró de una lesión grave después de recibir una patada con los tacos por delante en su tobillo derecho, contra el que su rival cargó sin ninguna opción de disputar el esférico. Pese a lo aparatoso de la entrada, el de L'Hospitalet pudo continuar sobre el terreno de juego, aunque dio un susto importante durante los minutos que estuvo tendido sobre el césped.

Ernesto Valverde no quiso arriesgar con Jordi Alba

Quien valoró el estado físico de Jordi Alba tras el enfrentamiento fue Ernesto Valverde, que explicó los motivos que le llevaron a cambiar a sus dos laterales titulares a pocos minutos del final. Más allá de una rotación para darles descanso, el técnico reveló que no quiso jugársela con un compromiso importante a pocos días vista.

"En el caso de Sergi Roberto había recibido un golpe en la primera parte y ya se estaba resintiendo, Y en el de Jordi Alba, también por la entrada que recibió. El miércoles hay otro partido", destacó el Txingurri, que ya había preguntado al catalán cómo se encontraba durante los minutos posteriores a su contratiempo. No quiere correr más riesgos.